Hábitos que debes evitar
Es normal que por falta de tiempo o simplemente por desconocimiento tengas comportamientos y hábitos que están afectando tu salud y se están convirtiendo en una rutina de acciones repetitivas de las que no tienes total consciencia.
El estrés y la ansiedad son las consecuencias más comunes que viven las personas a causa de tener prácticas poco sanas, por eso queremos compartirte algunos de los hábitos que pueden estar afectando tu salud física y mental sin que te des cuenta.
No dormir bien
Dormir menos de 6 horas evita que tu mente y cuerpo se recuperen de los esfuerzos que realizas durante el día, la energía no solo se compensa con alimentos sino con descanso, no hacerlo puede desencadenar problemas de concentración, aprendizaje o trastornos de estado de ánimo. Si se te dificulta conciliar el sueño intenta tomar una infusión o té caliente para relajarte y prepararte para descansar.
Organismo lento por saltarse las comidas
Dejar de comer durante muchas horas no está proporcionándole menos calorías a tu cuerpo y mucho menos te va a ayudar a adelgazar, esto provoca que pongas más lento a tu organismo y le proporciones menos energía, por eso es tan importante establecer horarios y buscar opciones de snacks saludable como los frutos secos, estos te aportan pocas calorías y te dan sensación de saciedad para que llegues con menos hambre a tu próxima comida.
No hacer actividad física
Practicar deporte no solo te ayuda a mantener un peso saludable, la salud mental también es importante; tener un estilo de vida sedentario puede provocar cambios constantes de humor, falta de energía, dificultad para concentrarse, estrés, ansiedad, entre otros.
Crea tu propia rutina, no tienes que exigirle a tu cuerpo y tampoco tienes que convertirte en esclava de un gimnasio. Puedes bailar, trotar, caminar, saltar la cuerda, jugar hula hula o practicar tu deporte favorito.
Cenar alimentos saludables sin cuidar las cantidades
Si bien las frutas aportan vitaminas a tu cuerpo y el azúcar que poseen es natural (la fructosa) es muy importante cuidar muy bien la cantidad y las porciones que eliges.
Una opción deliciosa y además nutritiva para cenar son los batidos, así que si eres fan de las frutas, mezclarlas con una leche vegetal le vendrá muy bien a tu dieta. Ahora que ya sabes que tu cuerpo necesita una cena balanceada, puedes probar otras opciones para no aburrirte, asegúrate de incluir proteína, cereales integrales, frutos secos o vegetales.
Comprar comida preparada
Llevar una vida equilibrada y una dieta saludable no consiste en castigarte. Es cierto que debemos incluir todo tipo de alimentos para darle un balance a nuestro cuerpo, pero lo importante es hacerlo de manera consciente, adaptándolo a una alimentación balanceada.
Algunas ideas pueden ser:
• Reemplazar los productos de harina refinada, por unos de harina integral.
• Si tienes un antojo, cúmplelo y disfrútalo, pero no te excedas con la cantidad.
• Si te gusta cocinar aprenderás a conocer más a fondo qué alimentos le convienen más a tu cuerpo, el aceite de oliva y de coco es una alternativa saludable y reemplaza perfectamente un aceite de girasol tradicional.
Comenzar una vida saludable cada vez es más fácil, gracias a que ahora existen cientos de opciones que te permiten disfrutar los sabores que más te gustan sin hacerle daño a tu cuerpo, sabemos que a veces, por falta de tiempo o de ideas dejamos pasar por alto el comer conscientemente, así que una buena manera de modificar estos hábitos es buscar recetas fáciles que no te tomen mucho tiempo y que le aporten a tu cuerpo los nutrientes necesarios para continuar el día.
Si quieres comenzar o continuar con un estilo de vida saludable ten en cuenta que todo funciona en conjunto. Si duermes bien pero no te alimentas correctamente vas a tener un efecto contrario. Ten una rutina de ejercicio con la que te sientas cómoda, come snacks saludables que te aporten energía, mantén una buena hidratación y evita la comida chatarra. Todo esto hará que notes los cambios físicos y mentales en tu vida, luego de esto ya no tendrás que preocuparte por seguir rigurosas dietas, simplemente se trata de disfrutar el proceso.
